Muchas veces, las empresas cometen errores muy comunes con los datos y se niegan a darse espacio para experimentar y fracasar. Los datos ayudan a los especialistas en marketing a tomar mejores decisiones y asumir riesgos más inteligentes, pero a veces, las mejores intenciones llevan a soluciones equivocadas.
Interpretar datos no siempre es fácil, se han visto “marketers” que no alcanzan los resultados esperados por no darse espacio para aprender, crecer, fracasar y mejorar a partir de la experiencia. Es por ello que aquí te dejamos algunos ejemplos de cómo piensan las grandes empresas que se centran en los datos y en cómo aplicarlos a tu negocio:
1.Mira tus métricas como parte de una historia, no como un cuadro cerrado: Uno de los mayores errores que pueden cometer los especialistas en marketing es analizar los datos de forma aislada. Si simplificas demasiado tus datos, perderás toda la magia que está sucediendo a tu alrededor. Para cada métrica que establecen y en función de la cual realizan optimizaciones, es necesario formularse preguntas claves.
¿Sé qué significa realmente esta métrica? Tomemos las conversaciones como ejemplo. Son centrales para cualquier negocio, pero no todas se generan de la misma manera. Cuando consideramos a los usuarios de múltiples dispositivos, los usuarios que pasan del mundo online a las tiendas físicas y las conversiones post impresión, comenzamos a ver que surgen verdaderas diferencias entre las distintas plataformas, y justo esas diferencias son las que pueden determinar cómo interpretar la medición del rendimiento y las inversiones futuras.
¿Estoy limitando lo que puedo aprender de mis métricas? No centres tu atención únicamente en lo que no está funcionando bien. Piensa en lo que puedes aprender de lo que estás haciendo correctamente, pero que podrías hacer mejor.
2.Considera el factor humano: El machine learning está creciendo rápidamente y nos enseña muchísimo. Pero las personas no son máquinas y, como tales, no siempre son máquinas de comprar. No necesariamente responden de la forma en que tú piensas que podrían hacerlo, hay que planificar ganando una mayor comprensión del factor humano que existe detrás de tus datos porque son comportamientos que probablemente impulsen tu negocio.
3.Aprende a valorar los fracasos: Cuando trabajamos con empresas más pequeñas o startups solemos ver algunos intentos de marketing desafortunados. Todo eso es parte del crecimiento, pero hay mucho por aprender de la manera en que estas empresas tienden a responder a esos fracasos. Hay que considerar que tal vez su marca aún no es lo suficientemente sólida o que no se han optimizado sus campañas de forma correcta en estas primeras etapas. Lo que hacen es buscar otro aspecto o lugar donde depositar la culpa.
Hay muchos componentes para medir el rendimiento, y el fracaso es uno de ellos. En las grandes empresas prueban algo y si fracasan se vuelcan de inmediato hacia una estrategia que les asegure el éxito, con la justificación de que los clientes simplemente no se encuentran allí o de que el canal no resulta adecuado para su negocio. Es importante demostrar a tu equipo que el primer paso para el crecimiento puede manifestarse en el fracaso -y tus logros-, incluso si no puedes tomar medidas inmediatas en función de la respuesta, reconocerlo es el primer paso para hacer bien lo que corresponde.
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