En la era de la Web 1.0 bastaba con incluir un sitio web en buscadores e intercambiar links con clientes y/o sitios Web amigos para “existir online”. Pero los tiempos cambiaron, los algoritmos de Google se volvieron más exigentes y la competencia online aumentó, al punto que las empresas que aún habitan en la esfera 1.0 son prácticamente invisibles en la Web.
Participar y autopromocionarse en las Redes Sociales ayuda en algo, pero el resultado es escaso si el sitio Web no aparece entre los primeros resultados de búsqueda en los buscadores más importantes, comenzando por Google.
Hay distintas maneras de lograr mayor visibilidad en la Web, algunas son gratuitas, y todas exigen que se dedique tiempo y trabajo para lograr este objetivo.
1) Definir de qué trata el sitio.
Es esencial que el sitio Web tenga un tema central, asociado a su línea de productos y/o servicios, o a una temática de nicho si se trata de un blog noticioso o de opinión. Este tema central permite definir aquellos conceptos que representan la marca de la empresa, organización o persona, y son el imán que atraerá al público para el cual está dirigido el sitio Web.
2) Descubrir quién visita el sitio y por qué.
No importa cuántas visitas tenga un sitio Web, si no se sabe por qué lo visitan entonces no sabrá cómo sacarles provecho. La mejor manera de averiguar esta información estratégica es incluyendo el sitio en las Google Webmaster Tools e instalando Google Analytics en todas las páginas del sitio.
Ambas herramientas son gratuitas y, con el paso de las semanas, éstas entregarán estadísticas confiables acerca de las audiencias del sitio Web y sus hábitos de navegación. Con esta información usted podrá tomar las decisiones que harán que su sitio sea más visible.
3) Analizar las palabras clave del sitio.
Usando Google Webmaster Tools, es posible saber qué palabras clave buscan los usuarios de Google en relación al sitio Web y cuáles atraen visitas. Así, palabras o frases que atraen muchas visitas pero no están asociadas al tema central del sitio deben ser controladas, pues también son aquellas visitas con mayor porcentaje de rebote.
rebote: el porcentaje de rebote es el porcentaje de visitas a una sola página o visitas en las que el usuario ha abandonado su sitio desde la página de acceso (destino). Use este indicador para evaluar la calidad de las visitas; en caso de presentar un porcentaje elevado, significa que los usuarios no valoran como relevantes las páginas de acceso al sitio.
4) Reducir los rebotes.
Usando Google Analytics se puede reconocer cuáles contenidos producen un alto número de rebotes. En los casos que dichos contenidos sean importantes para el tema central del sitio, se pueden editar para quitar las palabras o frases negativas descubiertas anteriormente; y en otros casos basta con borrar los contenidos que no son un aporte al sitio. Pero se debe tener mucho cuidado con qué páginas se borran de un sitio Web, pues no todos los porcentajes de rebote alto son sinónimo de “página inútil”.
Las imágenes que atraen tráfico crean la ilusión de un gran número de visitas, pero lamentablemente no son un verdadero aporte a los objetivos del sitio Web. Para solucionar este problema sencillamente se puede borrar la imagen conflictiva y cambiarla por otra que tenga un nombre de archivo relacionado con el tema central del sitio Web.
Las consecuencias de estos cambios no serán inmediatas y posiblemente habrá que hacer ajustes posteriores. Con el paso de las semanas se verá la reducción de las visitas por temas erróneos, se reducirán las visitas con rebote y las estadísticas resultantes mostrarán al verdadero público del sitio Web.
5) Potenciar el tema central del sitio.
Aquellas palabras clave que reciben gran cantidad de impresiones y están asociadas al tema central del sitio Web, pero logran un número bajo de clics o ninguno, deben ser densificadas para lograr una mayor presencia en buscadores. Por ejemplo, editando publicaciones con poca visibilidad para incluir estas palabras y frases sub-utilizadas, pero sobre todo publicando nuevos contenidos con regularidad.
En la medida que el sitio Web aumente el uso de sus propias palabras y frases clave en los contenidos, mayor será la autoridad conferida por los buscadores a este sitio Web y mayor será la consecución de sus objetivos comerciales.
6) Corregir errores.
Aunque parezca de perogrullo, una página sin errores semánticos se posiciona mejor que las demás. Son comunes los problemas entre el título de la ventana, los meta-tags y las cabeceras de los artículos. Y Google se fija en todo lo que contiene una página Web, absolutamente todo.
Para ser claros, toda página de un sitio Web debe compartir el mismo título de la ventana con el título del contenido, es decir, <title>???</title>
debe ser igual que <h1>???</h1>
; y el meta “description” debe coincidir con el contenido de dicha página, idealmente usando los conceptos relacionados con el tema central del sitio.
La manera más simple de verificar que el sitio Web cumpla con los mínimos estándares es pasarlo por el test de la blancura. Algunos servicios gratuitos online cono Seozio y Page speed pueden detectar las incongruencias de un sitio Web y muestran incluso cómo solucionarlas.
Conclusión.
Un sitio Web es más visible para los usuarios a los que está dirigido cuando aparece en los resultados de búsqueda. Y esta visibilidad depende en gran medida del uso adecuado de palabras y frases clave presentes en las páginas del sitio, relacionadas directamente con el tema central del sitio (y por añadidura a aquello que representa); pero también depende de un trabajo constante para evitar las visitas que generan rebote.