Atrás quedaron los años en que Facebook y Twitter eran sólo plataformas de contacto entre familiares y amigos perdidos, previa llegada y uso global de ambas redes sociales. Tanto la red social de Mark Zuckerberg como la de microblogging, se han adaptado a las necesidades de los usuarios, quienes hoy las consideran importantes fuentes de información.

Según el estudio “The Envolving Rol of News”, realizado en 2015 por el Pew Research Center, el 63% de los usuarios actuales de Facebook y Twitter satisfacen en ellas su interés informativo. Los cambios en el algoritmo de ambas plataformas también han contribuido al salto que han dado estas cifras desde 2013, cuando la búsqueda de noticias llegaba al 47% en Facebook y 53% en Twitter.

Nuevas herramientas para el usuario informado

El 28 de Marzo recién pasado, la red social de los 140 caracteres celebró su primer año junto a Periscope, aplicación de videos en streaming desde el móvil. Gracias a su incorporación, se realizaron 220 millones de transmisiones a lo largo del este periodo, acercándonos en tiempo real a eventos, contenido informativo y de interés general.

Otro ejemplo es a nueva aplicación móvil del portal de noticias Infobae, disponible en versiones diferenciadas para usuarios argentinos y extrajeros que se informan a través de Twitter. La idea fue integrar y organizar las noticias de las cuentas oficiales de Infobae por temas de interés y en tiempo real, además de incluir tweets de usuarios relevantes.

Un dato interesante es que este aumento en el consumo de contenidos informativos en ambas redes sociales se aprecia en todas las franjas etarias y no sólo en el público más joven. Podemos concluir que el interés por estar al tanto de la actualidad es transversal.

Esta serie cambios surgen como respuesta a las necesidades de los usuarios, quienes valoran encontrar información diversa en una misma plataforma. Si se trata de mejorar la experiencia de usuario, optimizar los caminos para llegar a la información de interés y abrir las posibilidades de interactuar con ellos, los cambios siempre son bienvenidos.

Ya no basta con leer: queremos reaccionar, compartir y generar conversaciones. Participar en alguno de los miles de micro-debates que se generan a diario en redes sociales y poder influir en los contenidos tanto como ellos lo hacen en nosotros.